El Colegio de Médicos de Palencia fue escenario este martes de la presentación de un estudio donde se pone de manifiesto que losbebedores moderados de cerveza que siguen un patrón alimentariobasado en la dieta mediterránea presentan una menor incidencia deriesgos cardiovasculares, diabetes, hipertensión y osteoporosiscon una ingesta adecuada de la bebida fermentada. Este tipo de consumidor moderado, además, realiza mayor actividad física según la investigación.
El estudio 'Cervera, dieta mediterránea y enfermedad cardiovascular' ha sido realizado por diversas instituciones como el Hospital Clínico de la Universidad de Barcelona y el Instituto de Salud Carlos III. Dos miembros del Comité Científico del Centro de Información Cerveza y Salud presentaron su resultado, concretando que esta bebida puede formar parte de un estilo de vida saludable siempre que suconsumo sea moderado y por parte de adultos sanos.
"El consumo moderado se cifra 1 ó 2 cervezas para mujeres y 2-3 para hombres, aunque los efectos son opuestos para la salud cuando el consumo aumenta", según explicó Ramón Estruch, consultor del Servicio de Medicina Interna del Hospital Clínico de Barcelona. "Se trata de un estudio único en el mundo", concretó, al tiempo que recordó que la muestra ha sido realizada durante un año entre 1.249 personas con elevado riesgo vascular, aunque la investigación iniciada en 2003 concluirá en 2011 ampliándose a 7.500 consumidores de cerveza de forma moderada.
Por su parte, el profesor Jesús Román Martínez, presidente del Comité Científico de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (Sedca), agregó que se trata de dar a conocer al sector sanitario las características de una bebida como la cerveza "con connotaciones especiales, uso regular y común pero con muy pocos ensayos sobre sus beneficios".
"No se trata de un producto de alemanes o de centroeuropa, ya que el fabricarse a partir de cereales se asocia más a la dieta mediterránea", arguyó el doctor Estruch, quien añadió que esta bebida "tiene mala prensa" al existir una serie de malos hábitos alimenticios que están asociados a "la comida basura entre los que abusan" de ella.
Menor masa corporal
"En el ambiente español si se bebe moderadamente y se come de forma sana está demostrado que la cerveza no engorda y que el índice de masa corporal de estos consumidores es menor. Es preciso además que la ingesta de la bebida se realice acompañada de alimentos", agregó el investigador.
También se puso de manifiesto que por las características organolépticas de la cerveza y su bajo contenido alcohólico esta bebida puede incluirse en la dieta equilibrada de los deportistas en cantidades moderadas, al favorecer una rápida y efectiva rehidratación y evitar dolores musculares.
Otro de los aspectos destacados del estudio es que el ácido fólicocontenido en la cerveza es una vitamina esencial para el sistema nervioso y la regeneración de células, lo que ayuda a regular los niveles de hormocisteína, factor de riesgo en enfermedades cardiovasculares. También el consumo moderado de cerveza sin alcohol puede estar incluido en la dieta de aquellas personas que padecen hipertensión arterial, puesto que un botellín diario aporta diez miligramos de calcio, potasio y muy poco sodio.
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